Sunday, February 28, 2016

El Robo Perfecto Santiago de la Ossa. Miserabilismo

El Robo Perfecto

Como todos los días cuando la gente sale de camellar, alrededor de las cinco o las seis de la tarde, es la hora perfecta pa’ ir a levantar billullo, esto pa’ poder tragar en la noche y también pa’l vicio. Los sitios bacanos pa’l estrene de un celular nuevo, son las estaciones de Trasmilenio, el bus y lo los semáforos.

Ese día salí con los parseros, como todos los días al rebusque porque me estaba quedando cortico y ya no había más pegante.
Vimos a dos despistadas, las viejas iban caminando, ahí es cuando uno sabe que es el momento pa’ hacer de las suyas, Suripanta y Gargolia se le fueron a las viejas de frente y por el otro lado yo me quedé pilas por si las ricuras se devolvían y, así pasó, se dieron cuenta y retrocedieron, entonces BAAAAMMMM, entré en acción y le quité hasta las medias a las cuchibarbies, luego puyamos el burro para que nadie nos siguiera.

Ese día todo iba excelente, hasta que en la noche mientras nos soplábamos una pipita, POOMM, sonó la puerta, un grupo de mamertos entró a nuestra casita pa’llevarnos a prisión, en esos casos sólo importa uno, así que me pisé por una ventana, Gargolia y Suripanta no se avisparon y la tomba se los llevó pa’la cana.

Después de eso sabía que tenía que ir a buscarlos, así lo hice, me fui pa’l barrio, allí me dijeron que se los habían llevado pa’la principal y de una, yo y otros malandros llegamos a la estación con la idea loca de sacarlos, pero cuando entramos los chulos nos dieron plomo por todos lado, sólo yo, Suripanta y Gargolia quedamos intactos, pero guardados en la guandoca por muchos años pa’ver si aprendíamos a ser buenas personas.

No comments:

Post a Comment

Creando Palabras (Escritura Creativa)

  … Los gatos apruñan mi cuerpo. Mis puntas toriacers desaparecen. La arena nuevalle enjuarre mi cuerpo. Y se apodera de mí, mientras desv...